Los conductores de dos vehículos municipales, una pala y un camión, que estaban estacionados en la nave de obras de Arnao se llevaron una desagradable sorpresa a primera hora del pasado lunes cuando intentaron, sin éxito, poner en marcha los motores.

Pronto se dieron cuenta de lo que sucedía. No es que estuvieran averiados, sino que no tenían ni gota de combustible. Los tapones de los depósitos habían sido forzados, y en su interior no quedaba nada de gasoil. Se lo habían robado.

El botín asciende a unos 400 litros, «300 en la pala y 100 en el camión», puntualizó el concejal responsable de Obras, José Luis Garridos. El Ayuntamiento compra el gasoil a 1.04 euros el litro, así que el montante asciende a 416 euros, más el coste de los desperfectos ocasionados a los depósitos y a los candados del cierre perimetral de la nave de obras de Arnao, que también fueron forzados.

El Ayuntamiento ha presentado la correspondiente denuncia en el cuartel de la Guardia Civil, que ya investiga los hechos.